martes, 1 de noviembre de 2011

Xi'an. Xi'an ciudad (1ª parte)

La primera semana de Octubre es la conocida en China como “mid autumn festival” y es junto con el año nuevo chino las únicas vacaciones a nivel nacional que existen aquí. El nivel de paralización no llega a ser el del CNY pero sí que es bastante normal que los billetes de avión suban espectacularmente o que no sea posible encontrar billetes de tren u hotel en las zonas más turísticas del país.

En otras ocasiones no me he movido de mi lugar de residencia, pero este año, tal vez ya aburrido de no salir de Harbin para nada desde hacía unos cuantos meses, decidí pasarme 5 días en Xi’an (西安) para visitar principalmente los famosos Guerreros de Terracota y subir HuaShan (华山), una de las más famosas montañas chinas, que además dispone de carácter sagrado para los taoístas.

De todo el viaje en sí, lo que menos me llamaba la atención era visitar Xi’an pues salvo los 2 spots antes señalados no tenía conocimiento absoluto de otra de las grandes ciudades de China con más de 6 millones de habitantes. Tal vez esta ignorancia y falta de expectativas hicieron encontrarme con un lugar que realmente creo que es digno de visitar por si mismo ya que fue capital del Imperio Chino durante más de 1.000 años, a través de los cuales reinaron 13 dinastías y destino final en la antigua ruta de la seda que introdujo un continuo trasiego con forasteros convirtiéndola en una ciudad bastante multicultural, que se ve reflejada en su genial barrio musulmán que imprime un fuerte carácter a la zona que queda dentro de los muros.

De hecho son los muros de la ciudad antigua lo primero que me llamó la atención al llegar a la ciudad.




Como podéis ver se encuentran perfectamente conservados y como más tarde descubriría se permite subir a ellos para recorrerlos desde lo alto, incluso si quieres se puede alquilar una bicicleta para recorrer los casi 14 Km de longitud.

Otras de las atracciones de Xi’an son la Torre de la Campana


Y su homóloga la Torre del Tambor


Aquí podéis ver los enormes tambores que dan nombre a esta torre.


Aunque para mí, lo más espectacular de la ciudad empieza justo al lado de esta torre entrando por una calle peatonal plagada de gente y de restaurantes que mezclan el estilo tradicional chino con la cultura musulmana de una forma genial.





Y si vas a Xi’an por supuesto tendrás que probar los noodles tradicionales del lugar, los羊肉泡沫 - niu yang rou pao mo - que es una especie de spaghettis con sopa de pan de pita, setas y por supuesto carne de cordero, como el que servían en este restaurante que tan buena pinta tenía.



Casi al final de la calle peatonal y metiéndote por un callejón perpendicular a ella te encuentras con una de las entradas al barrio musulmán. Un callejón completamente abarrotado de gente


En el que la mezcla de culturas se hace muchísimo más evidente ya que te puedes encontrar con muchos puestos de frutos secos y dulces que parecen sacados de algún bazar turco




O puestos de mermelada o confituras regentados por chinos a los que se les nota sangre árabe.



Por supuesto no podían faltar en esta calle los famosos pinchos o panes de los que ya he hablado anteriormente en el blog.


Aunque algo que no había visto antes son estos pinchos de huevos “fritos”


Dentro del propio barrio existe una mezquita que también mezcla estilos occidentales y orientales aunque por desgracia la única entrada que yo encontré era esta y estaba cerrada



Por lo que no pude llegar a visitarla por dentro, además de que por lo que había leído, si no eres musulmán y estás acompañado de una mujer es muy probable que te prohiban la entrada. Aún así sí que fui capaz de encontrar el chino-minarete.

Lo que sí que fui capaz de encontrar fue el fake market y tiendas de souvenirs, que también se encuentra dentro del barrio musulmán, en unas galerías en donde además de los típicos objetos, cazadoras North Fake y bolsos




También puedes encontrar pequeñas copias de los soldados de terracota (de las que yo me he agenciado 3 piezas de unos 15cm cada una a un precio de 20 RMB el set) o puestos de pinturas tradicionales o costumbristas en las que podrás negociar el precio directamente con el artista.



Si vas a hacer un regalo a alguien, creo que es uno de los mejores y más “auténticos” que puedes comprar en Xi’an.

Aún así, si lo que realmente quieres es comprar un buen recuerdo, lo mejor es pasarse por el barrio artístico, que transcurre paralelo a la muralla sur de la ciudad y que aunque solo sea por la singularidad de su arquitectura también merece la pena ser visitado.







Además podrás estar seguro de que muchos de los objetos de la zona son realmente hechos por los propios vendedores y no traídos de cualquier fábrica situada en el medio de la nada.


O incluso llevaros un poster con un poema escrito a mano personalmente para ti por algún calígrafo profesional.



El barrio artístico yo lo visité el último día que estuve en Xi’an y lo descubrí un poco por casualidad mientras paseaba perdido por la ciudad y tras negarme a pagar los 40 RMB que costaba subir a la muralla para pasear sobre ella ya que me parecía un auténtico atraco.

Pasar dos días en Xi’an es tiempo suficiente para pasar por los puntos más turísticos y que merecen la pena ser visitados pero ya que estás ahí también hay que ir a ver los guerreros de terracota, cosa que hice mi segundo día de visita y que queda para el siguiente post.

PD: Las fotos tanto de este post como del siguiente no son demasiado buenas, ya que la mayor parte del tiempo tuvimos bastante niebla y cielos grises que no ayudaban con la luz y además el motor del objetivo de la cámara me ha dado problemas, quedándose bloqueado muchas veces, lo que tampoco ayudó en absoluto... De todos modos ya tengo puesto el punto de mira en otra cámara que espero me ayude a sacar mejores fotos que hasta ahora.